Introducción:
La cirugía bariátrica es una opción efectiva para tratar la obesidad mórbida y otras enfermedades relacionadas con el exceso de peso. No obstante, para que el procedimiento tenga éxito a largo plazo, es esencial que los pacientes se preparen adecuadamente tanto física como mentalmente.
A menudo, las personas con obesidad que buscan tratamiento quirúrgico han pasado por múltiples intentos fallidos de controlar su peso a través de dietas, pastillas, nutricionistas y rutinas de ejercicios que muchas veces son abortados por no dar resultados rápidos. Por lo tanto, la cirugía bariátrica a menudo se considera la «bala de plata» o el último recurso para alcanzar su objetivo de perder peso y llevar una vida saludable.
Sin embargo, considerar la cirugía como un último recurso y no entenderla como parte de un proceso, puede llevar a consecuencias desagradables a largo plazo. Es importante que los pacientes entiendan que la cirugía bariátrica no es una solución mágica y que requiere un cambio de estilo de vida significativo. Pues la inmensa mayoría de las veces, a la base de un sobrepeso o de una obesidad hay varios «enemigos ocultos» que, de no descubrirse, hay una alta probabilidad de que la cirugía bariátrica no dé los resultados esperados.
Esos «enemigos ocultos» suelen ser, por lo general, «enemigos internos». Y se trata de hábitos inconscientes poco saludables, enfermedades no tratadas, duelos no llorados, horas no dormidas, o tradiciones familiares y soluciones que sirvieron alguna vez pero ya no son útiles.
El secreto del éxito de la cirugía bariátrica a largo plazo radica en desenmascarar estos enemigos a tiempo, y erradicarlos a través de un adecuado acompañamiento profesional y de consciencia de los mismos. Los pacientes con obesidad no necesitan sólo de fuerza de voluntad para cerrar la boca, no es eso. Los pacientes necesitan más consciencia de lo que les ha traído a esta situación. Una vez que esta consciencia se hace, es mucho más fácil mantener los esfuerzos a lo largo del tiempo, cambiar hábitos y llevar la vida que siempre quisieron vivir.
Esta solución, algo extraña quizás en un principio, esconde una gran verdad, que describió el filósofo británico Allan Watts en su hermoso libro «La sabiduría de la inseguridad», en el inicio del capítulo «La consciencia de las cosas»:
«¿Qué vamos a hacer al respecto?» es una pregunta que sólo formulan quienes no comprenden el problema. Si un problema puede resolverse, comprenderlo y saber qué hacer al respecto son una y la misma cosa. Por otro lado, hacer algo con respecto a un problema que uno no comprende es como tratar de eliminar la oscuridad apartándola con las manos. Cuando se hace la luz, la oscuridad se desvanece de inmediato.
La «luz» a la que se refiere Watts es la Consciencia, es decir, la capacidad de darse cuenta de las cosas externas e internas. Y a la inversa, la «oscuridad» es la inconsciencia.
¿Y por qué la consciencia o inconsciencia son relevantes para el problema de la obesidad? Resulta que la mayoría de los centenares de pacientes que he atendido en mi consulta presentan recurrentemente hábitos inconscientes que les hacen engordar.
Algunos de estos hábitos tienen que ver con una relación intensa, ambivalente y, por supuesto, inconsciente con la comida: Ésta funciona como premio, como consuelo, como forma de dar y recibir amor, como centro y acompañante perfecto de celebraciones. Y también a veces es conflictiva, generadora de culpa, de una especie de «amor-odio». Pero casi siempre hay un «disfrute» en la comida que va más allá de la simple necesidad de satisfacción biológica del hambre.
Por cierto, hay otros hábitos que no tienen que ver con la comida: El sedentarismo, el insomnio crónico, la ausencia de estrategias para lidiar con la ansiedad, etc. Pero todos ellos comparten lo mismo: Son, en gran parte, inconscientes.
La mayoría de los pacientes que viven con obesidad desconocen o soslayan la presencia de estos «enemigos ocultos» que les hacen engordar, mientras ellos viven su vida en una especie de «piloto automático», las enfermedades mentales y los hábitos nocivos que están a la base de su obesidad se hacen crónicos sin que ellos lo sepan.
Casi siempre que pregunto por los hábitos alimentarios familiares, escucho historias en las que el dar y recibir amor se daba casi exclusivamente a través de la comida. O en donde los momentos felices siempre estuvieron – y están todavía – alrededor de la mesa o de la parrilla.
También me toca contemplar infinidad de historias de abandono temprano, en donde lo único que calmaba la angustia y la soledad era comer algún dulce proporcionado por alguna abuela compasiva. Así como también se veo recurrentemente historias de personas criadas a la manera antigua en el campo latinoamericano, en donde los niños «gorditos» se los tenía como más sanos. Sin duda huella del trauma generacional por la escasez de comida que afectaron a nuestro continente en épocas no tan lejanas.
Hoy la realidad social es distinta, hay muchas veces una abundancia de comida y las personas no logran lidiar con esta abundancia. Y tanto en chilenos como en inmigrantes recientes a Chile se produce el «efecto buffet», en el que se desea comer tanto como sea posible para no perderse nada.
¿Por qué es importante la preparación mental antes de la cirugía bariátrica?
Aunque la cirugía bariátrica puede ayudar a los pacientes a perder una cantidad significativa de peso, no es una solución mágica. Según un estudio publicado en la revista Obesity Surgery, el éxito a largo plazo depende en gran medida de la adherencia a un estilo de vida saludable y de la gestión de las emociones. Por lo tanto, es esencial que los pacientes se preparen adecuadamente, tanto física como mentalmente, para asegurar el éxito a largo plazo.
La preparación mental antes de la cirugía bariátrica es crucial para asegurar el éxito a largo plazo de la operación. Esta cirugía es una decisión importante y puede ser una experiencia estresante para muchos pacientes. Por lo tanto, es importante estar mentalmente preparado para enfrentar los desafíos que puedan surgir. Además, este procedimiento también implica cambios en el estilo de vida y la adopción de nuevas prácticas alimentarias, y la preparación mental puede ayudar a los pacientes a hacer frente a estos cambios y mantener una actitud positiva que garantice los resultados a largo plazo.
Según la literatura revisada, las cifras son abrumadoras: De las personas que no logran sus objetivos de peso tras la cirugía bariátrica, un 80% se debe a motivos psicológicos. Y me atrevería a decir que, según mi propia práctica profesional como Psicólogo Bariátrico, esa cifra podría ser mayor.
Es un hecho comprobado que las personas con obesidad tienden a presentar más problemas de salud mental que quienes no presentan problemas con el peso. Y aunque la cirugía bariátrica puede reducir sin duda los problemas de salud física y mental que aquejan a los pacientes, la evidencia acumulada indica que es sólo un paso en un tratamiento integral.
Las cosas como son: El paciente debe hacer un cambio de hábitos hacia una vida más activa y aprender a lidiar con la ansiedad en formas más saludables. De lo contrario, se arriesga a, en el mejor de los casos, a perder su inversión en la cirugía y reganar peso tras la luna de miel de un año. Y en el peor de los casos, a sufrir una serie de complicaciones de salud mental y físicas.
Hay casos donde la adaptación a la nueva vida después de la cirugía puede ser difícil y pueden surgir problemas como el aumento de pensamientos suicidas, abuso de alcohol, problemas de imagen corporal y conflictos con la pareja. Además, las personas que arrastran trastornos de personalidad no tratados antes de la cirugía pueden tener más dificultades para tener resultados positivos a largo plazo. Por eso, es importante dar un seguimiento cuidadoso a los pacientes después de la intervención bariátrica para poder intervenir tempranamente y optimizar sus beneficios en la salud mental.
La preparación pre bariátrica es esencial para el éxito a largo plazo del procedimiento. Los pacientes deben trabajar con un equipo multidisciplinario, informarse sobre los efectos secundarios, hacer cambios en el estilo de vida, y contar con el apoyo de amigos y familiares. Si bien la cirugía bariátrica puede ser una herramienta eficaz para tratar la obesidad mórbida y otras enfermedades relacionadas con el exceso de peso, no es una solución mágica.
En este artículo, proporcionaremos consejos y recomendaciones para ayudar a los pacientes a prepararse mentalmente para la cirugía bariátrica. En el fondo, a generar más consciencia en ellos respecto de lo que están haciendo, y así tengan más opciones de tener éxito.
Informarse sobre el procedimiento y sus efectos secundarios
Antes de someterse a una cirugía bariátrica, es importante que los pacientes informen a su equipo médico sobre cualquier preocupación o ansiedad que puedan tener. Es normal que los pacientes se sientan ansiosos antes de la cirugía, pero es importante que informen a su equipo médico sobre cualquier preocupación para que puedan ser abordadas y se les pueda proporcionar el apoyo necesario. Además, es importante que los pacientes estén informados sobre los posibles efectos secundarios de la cirugía.
Algunos efectos secundarios comunes incluyen náuseas, vómitos, dolor, «dumping» alimentario y diarrea. Si bien estos efectos secundarios suelen ser temporales, no afectan a todos los pacientes y disminuyen con el tiempo, es importante que los pacientes estén informados y preparados para manejarlos.
El equipo médico también puede proporcionar consejos y recomendaciones para ayudar a minimizar estos efectos secundarios y asegurar una recuperación exitosa después de la cirugía. En general, estar bien informado y comunicarse abiertamente con el equipo médico antes y después de la cirugía puede ayudar a los pacientes a sentirse más cómodos y seguros durante todo el proceso.
Trabajar con un equipo multidisciplinario compasivo y no crítico:
La cirugía bariátrica es una intervención quirúrgica importante que puede tener impacto en la salud física y mental de los pacientes de por vida. Por ello, es fundamental contar con un equipo médico multidisciplinario que pueda proporcionar una atención integral antes, durante y después de la operación.
Este equipo puede incluir cirujanos bariátricos, nutriólogos, nutricionistas, psiquiatras y psicólogos bariátricos especializados. Los cirujanos bariátricos son responsables de realizar la cirugía en sí misma y monitorear la salud física del paciente, mientras que los nutriólogos pueden ayudar a manejar las condiciones relacionadas con la obesidad. Los nutricionistas son fundamentales para desarrollar un plan alimenticio adecuado y sostenible a largo plazo después de la cirugía.
Por otro lado, los psiquiatras y psicólogos bariátricos pueden ayudar a los pacientes a lidiar con los aspectos emocionales de la obesidad y la cirugía, así como brindar apoyo y asesoramiento durante todo el proceso. El psicólogo debe ayudar a los pacientes a comprender los cambios emocionales y psicológicos que pueden ocurrir antes y después de la cirugía, y a desarrollar estrategias para manejarlos.
Es esencial que los profesionales de la salud, ya sean nutricionistas, psicólogos o médicos, brinden apoyo y orientación a los pacientes que luchan contra la ansiedad alimentaria de manera compasiva y no crítica. Cuando un paciente no alcanza los objetivos establecidos, es importante que los profesionales de la salud no lo juzguen o lo critiquen. En cambio, deben adoptar una actitud compasiva y de apoyo, alentando al paciente a seguir adelante con sus esfuerzos y brindando herramientas para superar las dificultades que puedan surgir en el camino.
Esta actitud compasiva no solo ayuda al paciente a desarrollar una mejor relación con su cuerpo y su alimentación, sino que también contribuye a reducir el estrés y la ansiedad que pueden desencadenar la conducta alimentaria problemática. Los profesionales de la salud deben entender que la recuperación de la ansiedad alimentaria es un proceso lento y complejo, y que el apoyo emocional es fundamental para el éxito del tratamiento.
Los pacientes que se someten a cirugía bariátrica, en muchos casos, han experimentado previamente críticas, discriminación y prejuicios debido a su peso. Por lo tanto, es esencial que los profesionales de la salud que los atienden no los juzguen o los desafíen por no cumplir ciertos objetivos. Si un paciente percibe que se le está tratando de manera crítica, esto puede tener un impacto negativo en su salud mental y emocional. En consecuencia, los pacientes tienen el derecho de buscar atención médica en otro lugar si no se sienten cómodos con el trato que están recibiendo.
Adoptar un estilo de vida activo y saludable
Comer alimentos saludables y hacer ejercicio regularmente no solo ayudará a mantener el peso perdido después de la cirugía, sino que también puede mejorar la salud en general, lo que a su vez puede aumentar la autoestima y la calidad de vida. Además, una dieta saludable y equilibrada puede ayudar a prevenir enfermedades relacionadas con la obesidad, como la diabetes y las enfermedades cardíacas.
El ejercicio regular también es crucial para la pérdida de peso y la prevención de la recuperación del peso después de la cirugía. Los pacientes pueden comenzar con ejercicios suaves y gradualmente aumentar su intensidad y duración a medida que se recuperan de la cirugía y mejoran su condición física. Además, el ejercicio puede ser una forma efectiva de liberar el estrés y la ansiedad que pueden surgir después de la cirugía bariátrica.
Mi ejercicio preferido para recomendarle a los pacientes que se preparan para una cirugía bariátrica es alentarlos a caminar al menos 8.000 pasos diarios. Caminar es un ejercicio relativamente fácil, con pocas contraindicaciones y que se puede mantener por el resto de la vida. Aporta infinidad de beneficios para la salud física y mental, y es particularmente útil y hasta placentero para personas que han sido reacias al ejercicio durante toda su vida.
Caminar permite al cerebro mantenerse alerta y sano, y es un ejercicio placentero que cimenta el autoestima de las personas. Las hace darse cuenta de que sí pueden lograr objetivos, y las llena de una energía que no pensaban que tenían. Es un primer paso que puede conducir a las personas a empezar el cambio de hábitos, las saca de sus casas, sus rutinas, las conecta con una economía local de pequeños negocios muchas veces desconocidos, y las conecta con la vida que hay alrededor de ellos.
Desarrollar una relación más saludable con la comida a través del «Mindful Eating»
El «Mindful Eating» o «alimentación consciente» es una práctica que implica prestar atención a las señales de hambre y saciedad del cuerpo, comer lentamente y disfrutar de los alimentos de manera consciente, sin distracciones externas.
Esta práctica puede ayudar a los pacientes a comprender mejor sus patrones de alimentación, identificar los desencadenantes emocionales y reducir los atracones de comida, lo que puede ayudarles a prepararse mejor para la cirugía. Además, la alimentación consciente puede ayudar a los pacientes a desarrollar una relación más saludable con la comida al fomentar una mayor conciencia y apreciación de los alimentos y a reducir la tendencia a comer de manera compulsiva o emocional.
Además, esta práctica de la atención plena al comer puede ser beneficiosa después de la cirugía bariátrica. Después de la cirugía, los pacientes tienen un estómago más pequeño y necesitan aprender a comer de manera diferente. La alimentación consciente puede ayudar a los pacientes a adaptarse a los nuevos hábitos alimentarios y a adoptar un estilo de vida saludable a largo plazo.
A diferencia de las dietas restrictivas que a menudo son vistas como una obligación y un castigo, la alimentación consciente se enfoca en disfrutar de la comida al prestar atención a los sabores, texturas, aromas y colores de los alimentos.
A menudo, las dietas restrictivas pueden ser difíciles de mantener a largo plazo y el cuerpo puede reaccionar negativamente a la restricción calórica, provocando antojos y un aumento en la ingesta de alimentos poco saludables. En contraste, la atención plena al momento de comer permite a los pacientes experimentar la satisfacción de comer de una manera más consciente y consciente, lo que puede llevar a una mayor satisfacción y control en la alimentación.
Al comer de manera lenta y atenta, los pacientes pueden desarrollar una mayor conciencia de sus patrones de alimentación y cómo sus emociones pueden afectar su relación con la comida. Y al ser más conscientes de sus hábitos alimentarios y cómo les afectan, pueden tomar decisiones más informadas y saludables en cuanto a qué y cuánto comen.
En síntesis, al permitir a los pacientes disfrutar de los alimentos y desarrollar una mayor conciencia de sus patrones alimentarios, el mindful eating puede ayudar a promover una alimentación saludable y sostenible a largo plazo.
Contar con el apoyo de amigos y familiares:
La cirugía bariátrica es un procedimiento importante que implica cambios significativos en la vida de los pacientes. Es una operación que puede tener efectos físicos y emocionales, y es importante tener un sistema de apoyo sólido para ayudar a enfrentar los desafíos que se presenten durante el proceso de recuperación.
Según la Asociación Americana de Cirugía Metabólica y Bariátrica, tener un sistema de apoyo es fundamental para el éxito a largo plazo de la cirugía bariátrica. La familia y los amigos pueden brindar apoyo emocional y práctico, como ayudar con las tareas diarias y ofrecer motivación para seguir adelante. Además, el apoyo también puede venir de grupos de apoyo de pacientes que han pasado por lo mismo y pueden compartir su experiencia y consejos para manejar los cambios físicos y emocionales.
Tener una red de apoyo fuerte puede ayudar a los pacientes a mantenerse motivados y enfocados en su recuperación, lo que puede aumentar las posibilidades de éxito a largo plazo.
Para generar relaciones familiares favorables tras la cirugía bariátrica, es esencial brindar apoyo emocional y ser comprensivo con el proceso de adaptación del paciente. Se debe evitar centrarse en el peso y en su alimentación desde la exigencia. Es importante hacer preguntas abiertas y ofrecer ayuda desculpabilizadora.
Se debe evitar tanto la evaluación constante del proceso del paciente como el desapego total. Para ello, se recomienda generar un ambiente facilitador donde se puedan identificar dificultades y hablar sobre ellas en el marco de una alimentación saludable adaptada a las necesidades individuales. El apoyo familiar es clave en el éxito de la cirugía bariátrica, y es recomendable que los familiares también puedan tener trato con profesionales para aclarar dudas y ser orientados.
Practicar técnicas de relajación y actividades de atención plena
La meditación, la respiración profunda y la relajación muscular progresiva son técnicas efectivas para reducir la ansiedad. Cualquier práctica que te ayude a centrar tu atención en la respiración profunda y la relajación muscular progresiva son técnicas efectivas para reducir la ansiedad.
La meditación, el yoga y el tai chi son prácticas que se han demostrado útiles para la regulación emocional, reducción del estrés y mejoramiento del bienestar físico y mental. En particular, el «mindfulness» o atención plena ha demostrado utilidad en una variedad de trastornos mentales y físicos como estrés, depresión, trastornos de ansiedad y trastornos de conducta alimentaria [3]. Además, un pequeño estudio observó que los pacientes con insomnio crónico mejoraron significativamente tras aprender técnicas de Mindfulness para lidiar con el estrés y el insomnio [4].
En cuanto a la ansiedad alimentaria, practicar meditación yoga, tai chi o mindfulness puede ayudar a los pacientes a manejar sus emociones, a aprender a vivir el momento presente y a reducir la ansiedad. La meditación por concentración, por ejemplo, consiste en centrar la atención en un solo punto, lo que puede ayudar a las personas a reducir la distracción y la preocupación. Asimismo, la respiración centrada es un ejercicio breve que consiste en centrar la atención en la respiración, lo que puede ayudar a reducir la ansiedad y el estrés [5].
Incluso la «apnea» o retención controlada de la respiración puede ser útil para conocer mejor el propio cuerpo, porque permite prestar atención a las sensaciones internas del cuerpo, como la frecuencia cardíaca, la tensión arterial y la oxigenación de la sangre, lo que puede mejorar la percepción de la propia salud. Además, la práctica de la apnea puede mejorar la capacidad pulmonar y cardiovascular, lo que puede mejorar la salud en general. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la apnea debe ser practicada con precaución y bajo la supervisión de un profesional para evitar lesiones o complicaciones. [1]
Mantener una actitud positiva y enfocada más en el presente que en el futuro puede ayudar a reducir el estrés y la ansiedad. La meditación y el mindfulness pueden ayudar a desarrollar esta actitud. Estas prácticas implican prestar atención plena a lo que ocurre en el momento presente sin juzgarlo, lo que ayuda a cultivar la conciencia y el equilibrio emocional.
Además, realizar «Actividades mindful» puede ser una forma útil de practicar la atención plena en situaciones cotidianas, como caminar, jardinear, tejer, escuchar música, hacer un deporte, aprender a tocar un instrumento o a cantar. Estas actividades pueden ayudar a reducir los niveles de estrés y a fomentar la concentración y el enfoque en el presente. Al practicar la atención plena de esta manera, es posible desarrollar una mayor sensación de control y equilibrio en la vida diaria, lo que puede ser beneficioso para la salud mental y física en general.
Buscar apoyo emocional profesional
Hablar con amigos, familiares o personas que ya hayan pasado por la experiencia de la cirugía bariátrica pueden ser de gran ayuda. Aunque lo más recomendable es recurrir a la ayuda de un profesional de la salud mental puede ayudar a reducir la ansiedad y brindar apoyo emocional.
Es importante no solo confiar en amigos y conocidos para informarse sobre la cirugía bariátrica. Porque aunque estas personas puedan ofrecer apoyo y sugerencias útiles, no siempre son las más expertas en el tema y pueden proporcionar información inexacta o incompleta. Lo mismo sucede con otros pacientes bariátricos: Cada paciente bariátrico es distinto al resto, y los consejos que sirvieron para una persona, no siempre sirven para todas
Además, la cirugía bariátrica es una decisión importante y puede tener un gran impacto en la vida de una persona, tanto física como emocionalmente. Es por eso que es esencial contactar a un psicólogo bariátrico especializado, quien puede brindar información precisa y completa, así como también ayudar a la persona a prepararse emocionalmente para la cirugía y el cambio de estilo de vida que puede acompañarla. Un psicólogo bariátrico, mejor si es parte de un equipo multidisciplinario, también puede ayudar a la persona a manejar los cambios emocionales y psicológicos que pueden surgir después de la cirugía, lo que puede ser fundamental para el éxito a largo plazo.
Cómo mejorar la autoestima antes de la cirugía bariátrica
La cirugía bariátrica es una herramienta para la pérdida de peso, pero la autoestima también juega un papel importante en el éxito a largo plazo de la operación. Estas son algunas estrategias para mejorar la autoestima antes de la cirugía bariátrica:
- Identificar las causas subyacentes de la baja autoestima: el examen de las causas subyacentes de la baja autoestima puede ayudar a los pacientes a trabajar en ellas antes de la operación.
- Hacer ejercicio: el ejercicio regular puede mejorar la autoestima al aumentar la confianza en la apariencia física y en la capacidad de hacer ejercicio.
- Adoptar un estilo de vida saludable: comer alimentos saludables y hacer ejercicio pueden mejorar la autoestima al mejorar la salud en general.
- Hablar con un profesional de la salud mental: un profesional de la salud mental puede ayudar a los pacientes a abordar problemas de autoestima y brindar apoyo emocional.
Manteniendo la salud mental después de la cirugía bariátrica
La Salud mental después de la cirugía bariátrica es importante para mantener una actitud positiva y asegurar el éxito a largo plazo de la operación. Estos son algunos consejos para la preparación mental después de la cirugía bariátrica:
- Mantener una actitud positiva: una actitud positiva puede ayudar a los pacientes a mantenerse motivados y comprometidos con el nuevo estilo de vida y las prácticas alimentarias.
- Buscar apoyo emocional: hablar con amigos, familiares o un profesional de la salud mental puede ayudar a los pacientes a abordar problemas emocionales y a mantenerse motivados.
- Mantener un diario: mantener un diario puede ayudar a los pacientes a realizar un seguimiento de su progreso y a identificar las áreas que necesitan mejorar.
- Participar en grupos de apoyo: unirse a un grupo de apoyo puede ayudar a los pacientes a conectarse con otras personas que han pasado por la misma experiencia y a recibir apoyo emocional y motivacional.
Conclusión y recomendaciones
La preparación mental es crucial para asegurar el éxito a largo plazo de la cirugía bariátrica. Los pacientes deben estar mentalmente preparados para enfrentar los desafíos que puedan surgir y adoptar un enfoque positivo y de apoyo. Es importante que los pacientes hablen con su equipo médico, practiquen técnicas de relajación y mejoren su autoestima antes de la cirugía. Después de la cirugía, mantener una actitud positiva, buscar apoyo emocional, mantener un diario y participar en grupos de apoyo pueden ayudar a los pacientes a mantenerse motivados y compromet
Bibliografía:
- American Society for Metabolic and Bariatric Surgery. (n.d.). Bariatric Surgery: Postoperative Concerns. ASMBS. https://asmbs.org/patients/bariatric-surgery-postoperative-concerns.
- Bustamante, Francisco, Williams D, Catalina, Vega P, Eduardo, & Prieto D, Benjamín. (2006). Aspectos psiquiátricos relacionados con la cirugía bariátrica. Revista chilena de cirugía, 58(6), 481-485. https://dx.doi.org/10.4067/S0718-40262006000600016.
- Cuesta, E. «¿Por qué meditar? 11 beneficios de la meditación». Hallado en https://azsalud.com/meditacion-y-yoga/por-que-meditar
Livingstone, C. (2019). Psychological preparation for bariatric surgery: a review of the literature. Journal of Obesity, 2019, 1-7. https://doi.org/10.1155/2019/8925757. - Mateo, J. Clínica SOBEsit@s. (2023). 5 claves para las relaciones familiares después de la cirugía bariátrica. Recuperado el 29 de marzo de 2023, de https://www.clinicasobesitas.com/actualidad/5-claves-relaciones-familiares-cirugia-bariatrica/
- Obesity Action Coalition. (n.d.). Emotional Support After Weight Loss Surgery. OAC. https://www.obesityaction.org/community/article-library/emotional-support-after-weight-loss-surgery/.
- Olguín V, Pablo, Carvajal A, Daniela, & Fuentes S, Manuel. (2015). PATOLOGÍA PSIQUIÁTRICA Y CIRUGÍA BARIÁTRICA. Revista chilena de cirugía, 67(4), 441-447. https://dx.doi.org/10.4067/S0718-40262015000400016
- Schauer, P. R., Bhatt, D. L., Kirwan, J. P., Wolski, K., Aminian, A., Brethauer, S. A., … & Kashyap, S. R. (2017). Bariatric surgery versus intensive medical therapy for diabetes—5-year outcomes. New England Journal of Medicine, 376(7), 641-651. https://doi.org/10.1056/NEJMoa1600869.
- Stepko, B. (2021). La meditación contribuye también a la salud física https://www.aarp.org/espanol/salud/enfermedades-y-tratamientos/info-2021/beneficios-fisicos-de-la-meditacion.html
- Vásquez-Dextre, Edgar R. (2016). Mindfulness: Conceptos generales, psicoterapia y aplicaciones clínicas. Revista de Neuro-Psiquiatría, 79(1), 42-51. Recuperado en 29 de marzo de 2023, de http://www.scielo.org.pe/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0034-85972016000100006&lng=es&tlng=es.
Deja un comentario