El éxito y fracaso de los Balones Intragástricos

El camino hacia la salud con las nuevas tecnologías: la verdad sobre los Balones Intragástricos y las transformaciones de peso y la grasa corporal.

‍La Cirugía Bariátrica sigue siendo el tratamiento más efectivo para la adiposidad y sus comorbilidades, pero aún existen barreras que obstaculizan su aceptación general. La epidemia creciente de adiposidad ha llevado a la necesidad de crear terapias menos invasivas, con un amplio margen de seguridad y eficacia para mejorar la pérdida de grasa corporal, al menos mayor a la que se logra con un tratamiento basado en dieta y ejercicio. Entre estas terapias emergentes se incluyen dispositivos que se colocan y se retiran mediante endoscopía, clasificados como: dispositivos que ocupan espacio, procedimientos restrictivos o de remodelación anatómica. También se incluyen técnicas percutáneas y cirugías menos invasivas. En general, se han demostrado mejoras en el metabolismo de la glucemia en pacientes diabéticos. En cuanto a la pérdida de grasa corporal, los resultados no superan los de la cirugía bariátrica, pero son mejores que los obtenidos con el tratamiento conservador (dieta y ejercicio) y tienen una tasa baja de eventos adversos. El uso clínico de una nueva técnica debe llevarse a cabo dentro de un programa de manejo multidisciplinario que incluya apoyo nutricional, psicológico, actividad física y médico. Debemos entender que estas terapias no están siendo creadas para sustituir la cirugía bariátrica, sino para aumentar las opciones de tratamiento en la población general, con mayor alcance e impacto. El objetivo del presente artículo es brindar una revisión actualizada de la literatura sobre las tecnologías emergentes para la mejora de la adiposidad.

El mundo está inmerso en una epidemia de obesidad, y encontrar formas eficaces de controlar y reducir la grasa corporal es una prioridad para muchos. La endoscopia bariátrica y la cirugía bariátrica siguen siendo los tratamientos más eficaces para la adiposidad y sus comorbilidades, pero aún existen barreras para su aceptación generalizada. Por ello, se necesitan terapias menos invasivas con un amplio margen de seguridad y eficacia para mejorar la pérdida de grasa corporal, al menos mayor que la conseguida con el tratamiento basado en dieta y ejercicio.

Una de estas terapias emergentes es el Balón Intragástrico, o balón gástrico. Se trata de un dispositivo que se coloca y se retira por vía endoscópica, clasificado como dispositivo ocupador de espacio, procedimiento restrictivo o remodelación anatómica. Se utiliza desde hace más de 20 años para tratar la obesidad y recientemente ha ganado popularidad en el ámbito médico.

El balón gástrico es una opción no quirúrgica que se coloca en el estómago a través de un endoscopio. Se rellena con una solución salina y permanece en el estómago durante un periodo de 6 meses. Durante este tiempo, ayuda a reducir la cantidad de comida que se puede consumir al ocupar espacio en el estómago, haciendo que la persona se sienta llena más rápidamente. Además, puede ayudar a reducir las hormonas del hambre, como la grelina, que puede ayudar a suprimir el apetito.

Casos de éxito del Balón Intragástrico

El balón gástrico es una opción segura y eficaz para quienes desean alcanzar sus objetivos de pérdida de peso. Los estudios han demostrado que la pérdida media de peso con el balón gástrico es del 14-15% del peso corporal total del paciente. Este porcentaje es significativamente superior al de la dieta y el ejercicio, que suele ser del 5-10% del peso corporal total. Además, se ha demostrado que el balón gástrico es más eficaz que otras opciones no quirúrgicas, como la banda gástrica laparoscópica, que normalmente sólo supone un 8-9% del peso corporal total.

El balón gástrico también se asocia a mejoras en el metabolismo de la glucosa en sangre en pacientes diabéticos. En términos de pérdida de grasa corporal, los resultados no superan a los de la cirugía bariátrica, pero son mejores que los obtenidos con el tratamiento conservador (dieta y ejercicio) y presentan una baja tasa de acontecimientos adversos. Por ello, el balón gástrico es una gran opción para quienes buscan conseguir una pérdida de grasa corporal sustancial sin los riesgos asociados a la cirugía bariátrica.

Aquí hay algunos casos de éxito de pacientes que han utilizado este dispositivo:

  1. Pérdida significativa de peso: Muchos pacientes informan una pérdida significativa de peso en el plazo de 6 meses a un año después de la inserción del balón.
  2. Mejora en los factores de riesgo relacionados con la obesidad: Además de la pérdida de peso, muchos pacientes también informan una mejora en otros factores de riesgo relacionados con la obesidad, como la presión arterial y los niveles de colesterol.
  3. Mayor motivación para hacer cambios en el estilo de vida: Algunos pacientes informan que el balón les ayuda a ser más conscientes de la cantidad de alimentos que están ingiriendo y les brinda una mayor motivación para hacer cambios positivos en su estilo de vida, como comer una dieta equilibrada y hacer ejercicio con regularidad.
  4. Mejora en la calidad de vida: Muchos pacientes informan una mejora en su calidad de vida después de la inserción del balón, debido a la pérdida de peso y a la mejora en otros factores de riesgo relacionados con la obesidad.

Es importante tener en cuenta que los resultados pueden variar de una persona a otra y que es necesario un enfoque integral para lograr y mantener la pérdida de peso a largo plazo, incluyendo cambios en el estilo de vida y un seguimiento de cerca por parte de un profesional médico.

Sin embargo, es importante recordar que el balón gástrico no es una solución «rápida». Es importante entender que el balón gástrico requiere un compromiso con el cambio de estilo de vida para tener éxito. Esto incluye seguir una dieta saludable, actividad física regular y cambios de comportamiento. Además, es importante recordar que el balón gástrico es una solución temporal, y es importante seguir trabajando para mantener un estilo de vida saludable después de retirar el balón.

El uso clínico de una nueva técnica debe llevarse a cabo dentro de un programa de gestión multidisciplinar que incluya apoyo nutricional, psicológico, de actividad física y médico. Debemos entender que estas terapias no se crean para sustituir a la cirugía bariátrica, sino para aumentar las opciones de tratamiento en la población general, con mayor alcance e impacto.

Si buscas una forma segura y eficaz de alcanzar tus objetivos de pérdida de peso, el balón gástrico puede ser una gran opción para ti. Consulta con tu médico para determinar si éste es el mejor tratamiento para tus necesidades individuales. Con la ayuda de un equipo multidisciplinar y un compromiso con el cambio de estilo de vida, el balón gástrico puede ayudarte a conseguir tus objetivos de pérdida de peso y mejorar tu salud en general.

Los riesgos y fracasos asociados a los balones:

Como con cualquier procedimiento médico, existen ciertos riesgos asociados a su uso. Algunos de estos riesgos incluyen:

  1. Complicaciones en la inserción o retiro del balón: Puede haber complicaciones durante la inserción o retiro del balón, como perforación del estómago o obstrucción intestinal.
  2. Dolor abdominal: Algunos pacientes pueden experimentar dolor abdominal después de la inserción del balón.
  3. Náuseas y vómitos: Estos son efectos secundarios comunes después de la inserción del balón.
  4. Reacciones alérgicas: Algunas personas pueden experimentar reacciones alérgicas a los materiales utilizados en la fabricación del balón.
  5. Desplazamiento o rotura del balón: Aunque raro, puede ocurrir que el balón se desplace o se rompa dentro del estómago.
  6. Recuperación del peso: Después de retirar el balón, algunos pacientes pueden recuperar parte o todo el peso perdido, lo que puede ser una frustración y desmotivación. Esto siempre ocurre en la medida que la persona atribuya al balón y no a la terapia Psiconutricional, la importancia que merece.

Es importante que los pacientes hablen con su médico sobre los riesgos potenciales asociados con los Balones Intragástricos antes de tomar una decisión sobre si es adecuado para ellos. Se recomienda una evaluación cuidadosa y un seguimiento de cerca por parte de un profesional médico durante todo el tiempo que se esté utilizando el balón.

Diferentes Balones disponibles en el Mercado y resultados en EEUU.

De los balones aprobados por la FDA y disponibles en el mercado, el balón Spatz3 refleja considerablemente mejores resultados en los EEUU.

¿Quién debe y quién no debe plantearse un balón intragástrico?

El balón NO es para quiénes cumplan las siguientes condiciones:
  • Embarazo
  • Personas ya operadas de cirugía bariátrica
  • Historial de trastornos alimentarios
  • Trastornos de la coagulación de la sangre
  • Úlcera gástrica activa o una enfermedad inflamatoria del intestino
  • Cáncer gástrico o esofágico
  • Dificultad para tragar
  • Trastornos graves del hígado o del riñón
El balón es para ti SI:

Te encuentras luchando contra la grasa corporal y has intentado todo, desde dietas rigurosas hasta ejercicio constante, pero aún no has logrado el éxito que deseas, un balón intragástrico podría ser una adecuada posibilidad para ti. Este dispositivo no invasivo puede ser la solución complementaria al tratamiento nutricional que necesitas para superar tus batallas de composición corporal.

El Balón Intragástrico es una opción ideal para aquellos que tienen un índice de masa corporal (IMC) de 30 o más, o para aquellos que tienen un IMC de 27 o más y padecen comorbilidades relacionadas con la obesidad, como diabetes tipo 2 o presión arterial alta.

Además, este procedimiento es una alternativa menos invasiva a la Cirugía Bariátrica, por lo que es una opción atractiva para aquellos que tienen miedo o no están preparados para una cirugía mayor. También es una buena opción para aquellos que no han logrado una pérdida de peso significativa con otras formas de tratamiento, como dietas y ejercicio.

En resumen, si te sientes desesperada y desmotivada por no lograr la pérdida de grasa corporal que deseas, si tienes un IMC elevado o comorbilidades relacionadas con la obesidad, o si simplemente buscas una alternativa menos invasiva a la Cirugía Bariátrica, puedes considerar un Balón Intragástrico. Con un enfoque integral y un seguimiento de cerca por parte de un equipo profesional (Médico, Nutricionista y Psicólogo), puedes lograr la pérdida de grasa corporal, junto con desarrollar una mente-cuerpo sana y consciente.

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